Selección Octubre 2023

VIÑEDOS DE PÁGANOS

La familia Eguren creó está bodega en 1998, en pleno apogeo de modernidad en Rioja. Está situada en Laguardia siguiendo la barrera protectora de la Sierra de Cantabria hacia el este y dentro ya de la provincia de Álava y, por tanto, de la Rioja Alavesa. Uno de los elementos más emblemáticos de Viñedos de Páganos son sus calados subterráneos excavados en la roca con los que se busca unas condiciones óptimas para el envejecimiento del vino.
Pese a servir de centro logístico a todas las firmas del grupo Eguren, es una de las bodegas de menor producción (unas 60.000 botellas), dependiente de los dos viñedos que sirven de punto de partida a los vinos que aquí se elaboran.
La bodega comparte espacio con el excepcional viñedo llamado el Puntido, vocablo antiguo con significado de descansillo, semejante a la terraza que forma éste entre la sierra de Cantabria y la depresión del río Ebro. Es de este viñedo de donde proceden las uvas para elaborar el vino Calados del Puntido, plantado en 1975, ocupa 25 hectáreas en espaldera en una suave ladera con orientación mediodía y está compuesto en su totalidad por Tempranillo.

La zona se encuentra bajo la influencia de un clima atlántico con matices de continental, al abrigo de los fríos vientos del norte gracias a la sierra de Cantabria. Los suelos de esta propiedad, de textura arcillo-calcárea o franco-arcillosa con una elevada presencia mineral, confieren al viñedo, y por lo tanto al vino, un singular carácter mineral de extraordinaria personalidad. Bajo él, un subsuelo de roca arenisca, donde las raíces se introducen aprovechando al máximo cada hueco. La variedad Tempranillo, perfectamente adaptada a estos suelos, expresa en los vinos el terruño en el que se encuentra plantado el viñedo.

CALADOS DEL PUNTIDO 2018

Variedad uva: Tempranillo.

Suelo: Franco-arcilloso.

Elaboración: Fermentación alcohólica durante 9 días con control de temperatura entre 26-28° C, realizando 1 ó 2 remontados diarios en su primera fase y terminando con un remontado.

Crianza: 16 meses en barrica nueva de roble francés.

Características: Color picota con ribetes violáceos. Capa media-alta. Lágrima densa.

Intensos y potentes aromas. Inicialmente aparecen los tostados, las notas lácteas y especias (cacao, vainilla). Al abrirse la fruta roja va ganando intensidad y complejidad. Potente y expresivo, goloso, con un paso sedoso y carnoso. Mucha carga frutal (frutos rojos) acompañados de buenos tostados. Equilibrado. Acidez marcada. Taninos suaves. Final largo y muy persistente con postgusto lleno de tostados y especias.

Temperatura de consumo: 15-16°C.

Consumo: Ahora y en seis años.

TESO LA MONJA

Teso La Monja marca el comienzo de una nueva era de Marcos y Miguel Eguren en la

Denominación de Origen de Toro, una tierra de la que se enamoraron por la capacidad de las viejas cepas prefiloxéricas toresanas para dar a luz vinos únicos. Una primera etapa de éxito en estas tierras se enmarca en el trabajo de la bodega Numanthia Termes –un proyecto en conjunto con otros accionistas- con la que conseguieron los 100 puntos de Parker para uno de sus vinos, Termanthia. En 2008, tras recibir su oferta, vendieron la bodega a Louis Vuitton Möet Hennessy (LVMH). Anteriormente a la venta, ya habían iniciado un proyecto paralelo en Toro, con unas hectáreas adscritas a una nueva bodega, con un enfoque diferente: viñedos con más grava en superficie, orientados al Norte, con ciclos vegetativos más largos.

Todo ello con el objetivo de lograr vinos que transmitan equilibrio, elegancia y el máximo potencial de la tierra. La nueva bodega, Teso La Monja, se fundó en 2006, y en ella elaboran cinco vinos: ‘Romanico’, ‘Almirez’, ‘Victorino’, ‘Alabaster’ y ‘Teso La Monja’. Cinco vinos que transmiten la potencialidad de la Tinta de Toro con elegancia, la sutileza y la frescura, atributos compartidos por todos sus vinos.

Nos hallamos ante una bodega situada en Valdefinjas (Zamora), de sobria y bella arquitectura, construida con materiales nobles que conjugan a la perfección la visión más moderna y actual a la hora de elaborar grandes vinos sobre unos cimientos basados en la experiencia, la historia y el buen hacer. La bodega cuenta con 5 sistemas de elaboración -5 tipos de depósitos para una vinificación precisa-: cerrados con pisados, cerrados convencionales, tronco cónicos abiertos, abiertos con pisados, abiertos de madera.

Poseen 90 hectáreas de viñedo viejo y de edad media y 72 hectáreas de viñedo joven. Los viñedos tienen orientación Norte, con ligeras pendientes y protegidos de los vientos cálidos, que ofrecen ciclos vegetativos más largos con relación a los de la zona de Toro para lograr unos vinos que transmitan frescura, equilibrio, elegancia y el máximo potencial de la mineralidad de la tierra.

ROMÁNICO 2020

Variedad uva: Tinta de Toro.

Suelo: Arenoso.

Elaboración: Fermentación con levadura autóctona a una temperatura de 25-27°. Maceración con hollejos durante 21 días.

Crianza: 6 meses en barricas de roble francés.

Características: Rojo granate de capa alta y ribete púrpura limpio. Aroma a frutos rojos maduros, con bayas del bosque. El fondo tiene toques picantes, con unos toques a pimienta poco invasivos. En boca es un vino potente y carnoso donde se aprecian claramente las notas frutales y especiadas.

Temperatura de consumo: 16°C.

Consumo: Ahora y en cinco años.

ALMIREZ 2021

Variedad uva: Tinta de Toro.

Suelo: Arenoso.

Elaboración: Fermentación y maceración con los hollejos durante 20 días a 24-26° de temperatura.

Crianza: Envejece durante 14 meses en barricas francesas 70% de un vino y 30% barricas nuevas de roble francés.

Características: Intenso y bonito color picota con reflejos amoratados. Capa alta.

La protagonista en nariz es la fruta roja que gana intensidad y madurez con la aireación. Muchas notas especiadas, café, chocolate, vainilla, algo de picante y sutiles toques minerales. Elegante fondo de tostados y ahumados. La madera está muy bien integrada pues no resta protagonismo a la fruta. Con un ataque suave y muy agradable y de paso sabroso y cremoso, y textura sedosa. Taninos pulidos. Buena acidez y muy equilibrado. Final largo y persistente con sensaciones especiadas y balsámicas.

Temperatura de consumo: 16°C.

Consumo: Ahora y en siete años.